Simón Ramírez (Ciclo Técnico Superior en Dirección de Servicios de Restauración): "Dentro de cinco años, me veo creando mi negocio de coctelería"
Simón Ramírez tiene 20 años, nació en Blanes y ha vivido toda la vida en Lloret de Mar. En el CETT, estudia el ciclo de Técnico Superior en Dirección de Servicios de Restauración y sus aficiones están muy relacionadas con este gremio. Siempre ha tenido facilidad de comunicación con las personas.
¿Por qué te decidiste estudiar este ciclo en el CETT?
Cuando finalicé la ESO, no encontraba qué era lo que me podía gustar, ilusionar y motivar para continuar mi vida académica. Lo vi el día que trabajé de camarero con mi padre, porque que me gustó mucho, y, como quien no arriesga no gana, decidí estudiar el ciclo de Servicios en Restauración en mi pueblo, la mejor decisión que he tomado en mi vida. Gané una beca al mejor alumno para continuar con mi motivación y gracias a esta oportunidad estoy hoy en el CETT.
¿Qué destacarías del profesorado de tu ciclo?
La transmisión de motivación que hace inspirarte para seguir estudiando, las veces que te repiten las lecciones de clase para que lo puedas entender todo a la perfección y, por encima de todo, su compromiso.
¿Y de las prácticas que te ofrece el CETT?
El primer año que hice prácticas en el CETT fue un cambio muy sorprendente. Todo era muy delicado y más profesional, y estéticamente el Aula Restaurant me enamoró. Pero lo que más tengo que destacar es el servicio al cliente. La oportunidad de hacer realidad tu motivación con gente de fuera y poco a poco conseguir tu objetivo es realmente impresionante.
¿Qué le dirías a una persona que contempla estudiar un ciclo en el CETT pero que todavía no ha dar el paso definitivo?
Si realmente tu pasión es la hostelería, no lo pienses dos veces: los jóvenes somos el futuro y debemos guiarnos por aficiones y motivaciones. Siempre tenemos tiempo para equivocarnos y, si no lo intentas, no lo sabrás nunca.
¿Cómo te ves profesionalmente dentro de cinco años?
Dentro de cinco años me veo creando mi negocio de coctelería, donde elaboraría bebidas de alta calidad y siempre sorprendería al cliente para transmitir la pasión y la dedicación. Más adelante, me gustaría poder estudiar el Máster de Profesorado para trabajar en una escuela como el CETT y poder enseñar a los jóvenes que el mundo de la hostelería no sólo es servir un plato que ha hecho el cocinero, sino la delicadeza que hay en él, la sensación de estar en un ambiente cómodo y, cuando se degusta un plato, que te lleve a un mundo de sensaciones desconocidas y disfrutar de esta experiencia.
